Esperanza segura y abundante

Lectura inicial: Romanos 15:13 (NTV)

Le pido a Dios, fuente de esperanza, que los llene completamente de alegría y paz, porque confían en él. Entonces rebosarán de una esperanza segura mediante el poder del Espíritu Santo.

Introducción

¿Qué es la esperanza?

  1. El anhelo o deseo de algo, acompañado con la expectativa o confianza de su cumplimiento o realización.
  2. Esperar viene de una raíz que significa literalmente respirar. Esto implica un peligro, porque cesar de esperar es realmente ahogarse
  3. Jesucristo es la única esperanza valedera para todos los hombres y todos los pueblos en todos los tiempos.
  4. La esperanza cristiana expone la total desesperanza (o desesperación) de los seres humanos sin Cristo. 
  5. La iglesia está llamada a infundir esperanza al mundo, para esta generación y la próxima. 
  6. No es porque el presente está vacío que esperamos para un nuevo futuro. Esperamos un futuro por lo que Dios ya ha hecho y por lo que ha prometido que hará.

Enseñanza

Cita: Ezequiel 37:11-14

«Luego me dijo: «Hijo de hombre, estos huesos representan al pueblo de Israel. Ellos dicen: “Nos hemos vuelto huesos viejos y secos; hemos perdido toda esperanza. Nuestra nación está acabada”. Por lo tanto, profetiza y diles: “Esto dice el SEÑOR Soberano: ‘Oh pueblo mío, abriré las tumbas del destierro y haré que te levantes. Luego te regresaré a la tierra de Israel. Cuando eso suceda, pueblo mío, sabrás que yo soy el SEÑOR. Pondré mi Espíritu en ti, volverás a vivir y regresarás a tu propia tierra. Entonces sabrás que yo, el SEÑOR, he hablado y que he cumplido mi palabra. ¡Sí, el SEÑOR ha hablado!’”».

  1. “hemos perdido toda esperanza” – El llamado de Dios a la vida llena de esperanza comienza justo en el instante en que nos hemos sentido vacíos y faltos de toda esperanza. Jesús dijo: «Dios bendice a los que son pobres en espíritu y se dan cuenta de la necesidad que tienen de él, porque el reino del cielo les pertenece» (Mateo 5:3).
  2. “oh pueblo mío” – Nuestra esperanza segura y abundante proviene de nuestra nueva posición e identidad en Jesucristo. ¡Somos su pueblo! ¡Somos hijos de Dios! El Apóstol Pablo enseñaba a la iglesia en Roma diciendo: «Debido a nuestra fe, Cristo nos hizo entrar en este lugar de privilegio inmerecido en el cual ahora permanecemos, y esperamos con confianza y alegría participar de la gloria de Dios» (Romanos 5:2).
  • “te regresaré a la tierra de Israel” – Nuestra esperanza segura y abundante proviene de nuestra segura herencia en Jesucristo
  • La Palabra de Dios revela que somos herederos en Cristo. Romanos 8:17 (NTV): «Así que cómo somos sus hijos, también somos sus herederos. De hecho, somos herederos junto con Cristo de la gloria de Dios; pero si vamos a participar de su gloria, también debemos participar de su sufrimiento».
  • Nuestra herencia es el Reino de Dios. Mateo 25:34: «Entonces el Rey dirá a los que estén a su derecha: “Vengan, ustedes, que son benditos de mi Padre, hereden el reino preparado para ustedes desde la creación del mundo».
  • Nuestra herencia es TODO en Cristo porque Cristo es heredero de TODO (Hebreos 1:2). Romanos 8:32: «Si Dios no se guardó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿no nos dará también todo lo demás?». 
  • «abriré las tumbas del destierro” – Esta herencia se anticipa ahora con nuestra liberación. Colosenses 1:12-14: «y den siempre gracias al Padre. Él los hizo aptos para que participen de la herencia que pertenece a su pueblo, el cual vive en la luz. 13 Pues él nos rescató del reino de la oscuridad y nos trasladó al reino de su Hijo amado, quien compró nuestra libertad y perdonó nuestros pecados».
  • «haré que te levantes” – Esta herencia se anticipa ahora con nuestra prosperidad integral. Deuteronomio 28:13: «Te pondrá Jehová por cabeza, y no por cola; y estarás encima solamente, y no estarás debajo, si obedecieres los mandamientos de Jehová tu Dios, que yo te ordeno hoy, para que los guardes y cumplas».
  1. «pondré mi Espíritu en ti» – Esta herencia se anticipa ahora con la presencia del Espíritu Santo.
  2. Como leímos al principio en Romanos 15:13 (NTV) «rebosarán de una esperanza segura mediante el poder del Espíritu Santo». La Palabra de Dios nos enseña que el Espíritu Santo es la garantía de nuestra herencia adquirida. 
  3. Efesios 1:13-14 (NTV): «Y ahora ustedes, los gentiles, también han oído la verdad, la Buena Noticia de que Dios los salva. Además, cuando creyeron en Cristo, Dios los identificó como suyos al darles el Espíritu Santo, el cual había prometido tiempo atrás. El Espíritu es la garantía que tenemos de parte de Dios de que nos dará la herencia que nos prometió y de que nos ha comprado para que seamos su pueblo. Dios hizo todo esto para que nosotros le diéramos gloria y alabanza».
  • «volverás a vivir» – Nuestra esperanza segura y abundante está en el poder de la resurrección de Jesucristo. Romanos 6:4 (NTV): «Pues hemos muerto y fuimos sepultados con Cristo mediante el bautismo; y tal como Cristo fue levantado de los muertos por el poder glorioso del Padre, ahora nosotros también podemos vivir una vida nueva».